La Agenda Semanal

Una selección de propuestas de ocio y cultura en Madrid

29 octubre, 2009

Las pasiones de la Agenda

Si querés que te diga la verdad:
Jamás quisiera envejecer
Y mucho menos morirme.

Me aferro a las curvas de mi cuerpo
a los reflejos limpios de mi carne
y me aterro al observar
las primeras señales del tiempo sobre mi rostro.
Aún puedo esconderlas.
Aún no contemplo fisuras irreparables.
Pero el paso de los días me amenaza.
Me digo que sonreiré con otra belleza
Que seré abuela de largas trenzas
y muchos cuentos y poemas y pasteles
pero no me engaño:
No me hace ninguna gracia
(Gioconda Belli, Notas para la madurez)



Estimados agenderos,

Mañana día de las brujas cumplo treinta y seis otoños y para qué voy a engañaros, la gravedad comienza a demostrar su teorema en mí, y observo que tengo algunas arrugas que no son por reír. Esto no es que me importe (demasiado), pero sí lamento que haya mañanas que me duelan los huesos, y tardes en las que ya no aguante los zapatos, y que el sueño aparezca nada más dar las doce. Menos mal que mi mente me dice que aún hay tiempo, que mientras tenga “quieros” que querer en mi lista no habrá ningún problema, porque eso querrá decir que aún estoy (que es muy distinto de “seguir”) viva.

Si queréis soplar las velas conmigo, invitados estáis. Ya sabéis donde.

CINE

Yo también. ¿Para qué quieres ser una persona normal?. Si Sabina se hubiera tenido que enfrentar a esa pregunta, quizás hubiera cantado eso de “besos en la frente, besos en la frente le dan…besos en la frente, nadie quiere ir más allá”, pero el protagonista de esta película en vez de cantar llora….

Agenderos, escribo esta recomendación unas dos horas después de haberla visto. Si, ya sé que es inusual en mí, pero por una vez, no creo que me (nos) pase nada. Os comento que era un poco escéptica a citar esta película aquí, porque no sabía si esta sería una historia demagógica de minusvalías y superaciones y no me apetecía nada darle bombo y platillo. Además y sin que sirva de precedente y sin intención de cambiar la tónica general de esta agenda, no quería “hablar” sobre el evento, sino que quería criticarlo (y para criticar, hay que ver…).

Por eso, después de haber comprado mi entrada y de haber estado hora y media sentada enfrente de la pantalla, tengo que confesaros que me encuentro ante una difícil situación, porque no tengo muy claro si la película me ha encantado o me ha espantado. Sé que me ha gustado (y mucho) la actuación de Lola Dueñas, merecidísima Concha de Plata del pasado Festival de San Sebastian, pero ¿merece la pena gastarse siete euros (más o menos) por ver sólo una buena interpretación?. Me ha gustado (y mucho) el final, porque es el que tenía que ser…ni feliz ni triste…sino simplemente el único posible y real. Pero claro, si hubiera que acudir sólo por eso, mejor os lo destripo ahora y santas pascuas ¿no?. Me ha gustado también el personaje del hermano, que se enfrenta con la cara alta a los reproches sobre su normalidad. Y me ha gustado él, Pablo Pineda, que no encuentra su lugar ni con unos ni con otros.

Por el contrario, no apruebo la utópica realidad del protagonista, ni tampoco la marginalidad del personaje de ella, por ser la explicación a esa amistad, ni tampoco me ha gustado esa mezcla de imágenes reales y ficticias que a veces despistaban.

A pesar de todo esto, me alegro de haberla visto, porque me llevo una imagen grabada que vale su peso en oro, esa en la que le preguntan ¿para qué quieres ser una persona normal? Y él simplemente llora…

Nadie que no haya recibido disimuladas miradas por su diferencia, nadie que no haya tenido que saltar dos vallas en vez de una, nadie que no haya sentido una punzada de dolor por querer y no poder, entiende por qué alguien que no lo es quiere ser normal. Yo creo que ante esa pregunta también hubiera llorado.



500 días juntos. ¿Cuánto dura el amor?¿Un año?, ¿siete?, ¿toda la vida?. Sabina respondió acertadamente a la cuestión cuando dijo aquello de que el amor es eterno mientras dura. Sin embargo, hay a quienes esta argumentación no convence demasiado y por eso se enfrascan en complicados estudios y averiguaciones para tratar de explicar por qué unas historias se acaban y otras no. Así la profesora Cindy Hazan, de la Universidad de Cornell en Nueva York, no ha encontrado nada mejor en qué gastar su tiempo que en estudiar al amor y sus diferentes fases.

Para ello, esta mujer con más moral que el alcoyano, ha entrevistado a unas cinco mil personas de treinta y siete nacionalidades diferentes (que Spain será different, pero puede que los otros también lo sean) y estas son sus conclusiones.

Según Cindy, los seres humanos estamos programados para sentirnos apasionados entre 18 y 30 meses. Durante este tiempo somos unos auténticos adictos a nuestra pareja. Es verla, y ponernos a segregar dopamina y norepinefrina a tutiplén, y claro, así estamos, “eufóricos” perdidos.

Afortunadamente (o no), nuestro cuerpo reacciona contra ese estado que le mantiene tan excitado y nervioso y le obliga a tomarse un descanso para sobrevivir. Está claro que nosotros nos resistimos como buenos drogadictos que somos, y ante la negativa de abandonar nuestra sustancia habitual, al cerebro no le queda más remedio que darnos un narcótico de caballo que nos haga estarnos quietos y calmaditos. No es que las “anfetas” hayan dejado de molarnos, es que ¡nos han sedado! a base de endomorfinas y las encefalinas y por eso la pasión baja y las crisis aparecen. Esto dice Cindy que suele ocurrir al tercer- cuarto año de relación.

Y así, día tras días, semana tras semana, endomorfina tras endomorfina, el organismo se va haciendo resistente a los efectos de nuestras drogas de diseño pasional y anulando esa maravillosa fase de atracción. ¿Qué hacer entonces? Unos optan por abandonar a su camello y buscarse otro que le ofrezca nuevas sustancias que le “pongan” a tono, mientras que otros se habitúan a estas drogas “placebo” y tan contentos con sus dosis de cálido amor.

Este estudio es la particular visión de Cindy…

…Y 500 días juntos es la particular visión de Marc Weeb. Una historia atípica sobre el amor, donde él es un soñador que cree en los finales felices y ella es una escéptica de las relaciones.

Los críticos dicen que esta película engancha hasta a los más reacios en esto de ver comedias románticas. Ha sido la sorpresa de la temporada y no me extrañaría que diera aún muchas más.

Por favor, nada de drogas adulteradas: tomadlas en V.O.

TEATRO

Don Juan Tenorio. Claro que este ser, ni 500 días ni un mes, que a él las pasiones no le duraban ni una semana, es decir, no le duraban hasta que llegó ella, doña Inés. Y es que a este Don Juan bien le podría cantar Sabina eso de “porque el amor cuando no muere mata, porque amores que matan nunca mueren”. Y es que aunque sólo estuvieran juntos un instante, su amor no se extinguió, sino que duró toda la vida (y la del más allá).

¡Qué tenía Don Juan para volverlas locas!. Sin importarle condición (lo mismo doncellas que casadas) ni nobleza (damas de alta alcurnia o de baja casta) a todas conquistaba. Tal vez fuera su porte, tal vez fuera por saber decir mentiras como si fueran verdad, no lo sé, pero os confesaré que después de haber visto a Don Juan unas cuantas veces en acción, mis intereses han cambiado y ahora no es él quien me interesas, sino que me interesa Doña Inés.

Me pregunto qué tenía Doña Inés que volvió loco a este golfo!, ¡qué tenía Doña Inés que fue la única que le desnudó el alma sin ni siquiera tocarle el cuerpo!.

Sí agenderos, quizás sea que con el paso del tiempo (como ya os he dicho, cumplo mañana años) me intriga más lo que Doña Inés guardaba que lo que le pudiera ofrecer él y sinceramente, no creo que este amor naciera por ser un amor prohibido ni tampoco por ser objeto de una apuesta. Creo que el amor pilló desprevenido a Don Juan, porque él, que se esperaba resistencia se encontró la puerta abierta y no gastó palabras vanas en el asedio, ni tampoco utilizó ninguna treta…y claro, desacostumbrado como estaba a encontrar tan fácilmente el camino, le llegó el amor así de improviso…

Agenderos, como todos los años por estas fechas llega el Don Juan de Zorrilla a la ciudad de Alcalá de Henares. Estáis de enhorabuena, porque con este tiempo cálido casi primaveral que tenemos ahora la representación al aire libre no supondrá un problema. Además celebraremos un aniversario, porque el Don Juan alcalaíno
cumple veinticinco años y por eso se rendirá homenaje a todos los Don Juanes y Doña Ineses que por allí han pasado.
Será este viernes 30 y el sábado 31 en la Huerta del Palacio Arzobispal a las siete de la tarde.
Para los que como yo os lo perdáis (si, agenderos, me debo a mis invitados) comentaros que hasta el 28 de noviembre podréis disfrutar de “La Noches del Don Juan". Se trata de escenificaciones callejeras que nos recuerdan algunas de las andanzas más emblemáticas de este galán.
No sé si en esta apartada orilla, más clara la luna brilla, y se respira mejor, pero lo que sí que sé es que este evento no os lo debéis perder.

EXPOSICIONES

Lágrimas de Eros. Hace unas cuantas agendas comenté que el erotismo hoy en día estaba algo devaluado. La imagen se ha impuesto a la imaginación y salvo contadas excepciones reservadas a la literatura y a ese mundo inexplorado que es Internet (foros, chat, etc) nada está oculto a nuestra vista. Dije también en esa agenda, que son las palabras (escritas o dichas) el último reducto que nos queda a la hora de despertar nuestra sensualidad (que no sexualidad..). Quisiera yo tener el mismo arte que Sabina para provocar “vuestro interés” como cuando él canta “qué adelantas sabiendo mi nombre, cada noche tengo uno distinto, y siguiendo la voz del instinto, me pongo a buscar…” No doy más detalles, escuchar la canción.

De todas formas hay a quienes las palabras dejan más o menos indiferentes y piensan siempre que éstas, por muy evocadoras que sean, necesitan ir acompañadas de otros elementos más visuales. Ya lo dice el refrán, que tiran más dos tetas… que todos los versos de un poema, que tira más un cuerpo provocador y/o desnudo, que toda la literatura de este mundo. Claro que las tetas hasta hace cuatro días han sido algo que se ocultaba bajo corsés, corpiños, camisolas, vestidos y chalecos…

Pero también dice el refrán que a grandes males, grandes remedios…y si no me dejan ver el original en vivo y en directo, recurriremos a una copia. Y así, la pintura y la escultura, compensaron esa ausencia de “carne” con retratos, dibujos y figuras que reflejaban lujuria, deseo, sexo.. Porque fue la escultura quien nos enseñó la perfección del cuerpo humano (aunque fuera este fuera frío y de mármol), y fue la pintura la que insinuó el erotismo que destilan unos brazos alrededor de un vientre, o una mano intentando ocultar un pecho.

Lágrimas de Eros, recorre quinientos años de historia y de cómo en las distintas épocas se ha evocado la sexualidad y el erotismo. Dividida en siete capítulos, la exposición enseña mezcla obras clásicas con otras contemporáneas y para que nadie se llame a engaño, dicen los comisarios de esta muestra que tiene un carácter pansexual, incluyendo todas las orientaciones.

El Museo Thyssen-Bornemisza y la Fundación Caja Madrid os dejan hasta el próximo mes de enero enjugarle las lágrimas a este dios.


OTRAS SECCIONES

Semana Gótica. Bueno, bueno, bueno. No se le dedica un “día d”, ni tampoco una “noche d”…se le dedica TODA una semana. Como la vez pasada, vuelvo a preguntarme el porqué de estas diferencias, el porqué hay eventos que con un día basta para conmemorarlos y otros sin embargo necesitan de siete para que nos enteremos de qué va la cosa.

En esta ocasión, el hecho de que sea un evento “semanal” y no de una jornada ¿será para que no hablemos tanto de esta tribu o será para que hablemos más?. ¿Será una conspiración o simplemente se debe a una casualidad? ¿Será para justificar o por el contrario para provocar?.

Juzgad vosotros agenderos, pero sea cual sea vuestro veredicto, no matéis al mensajero, porque yo solamente os transmito el evento. Y este no es otro que una semana dedicada a la moda-estilo-o lo que sea Gótica.

Ellos dicen que no es sólo una estética, ni tampoco es un pose, sino que es una forma de ver y de entender la vida. Puede que recurran a ciertos modos estrafalarios que en algunos casos nos hagan cantar como Sabina eso de “desde que te pintas la boca, en vez de Don Juan, te llamamos Juan la Loca” (mis disculpas de antemano a los seguidores de Marilyn Masson) pero todo este envoltorio va más allá de lo que se ve.

Así que si queréis ver ese “más allá” desde el más acá, lo tenéis fácil, porque durante toda la semana lleva celebrándose en la Plaza de Felipe II La Semana Gótica de Madrid. Llegamos tarde, lo sé, pero aún así os cuento que el sábado habrá un encuentro de literatura, que incluye una charla con Jarck Mircala, el lanzamiento de Requiem (tercera parte de la trilogía La puerta Oscura), una mesa redonda sobre William Blake y la lectura dramatizada de El Cuervo de Edgar Allan Poe.

A las diez, como si de la pasarela Cibeles se tratara…Plataforma G nos presenta la oferta de los nuevos diseñadores góticos y ya el domingo, y en colaboración con la embajada de México, se celebra el Día de los muertos (yo preferiría celebra el día de los vivos…pero bueno). ¿Y por qué esta colaboración del otro lado del charco? Porque allí esta fiesta es de lo más singular. Si queréis saber más…no tenéis más que acudir.

Recordad…para criticar antes hay que conocer.


En fin parexelianos y gentes de otras galaxias, a veces dios da pan al que no tiene dientes y aquel que suspira por ser normal mira sorprendido al otro que se empeña por no serlo. A mi me gustaría que ninguno de los dos derramara ni una lágrima (ni siquiera de Eros) y que a la hora de amar, amaran y les amaran ….mucho más de quinientos días. Y como siempre y por favor, mucho cuidado, porque si alguno falta no serán 19 días y 500 noches lo que tardaré en olvidar...

22 octubre, 2009

La Agenda con Jersey (¡por fin llegó el frío!)

Para atrapar un sueño es necesario
haberse despertado muchas veces
con el agrio sabor de una manzana
tocada por la mano del invierno.
...
Para atrapar un sueño no basta con tenerlo
(Daniel Rodriguez Moya, Cambio de Planes)


Estimados agenderos,

Pues yo os lo confieso, de sueños en general voy bien, pero de "sueño" en singular, ¡tengo para dar y sobrar!, y así ando yo ojerosa y cansada esta semana. Quizás por eso, la agenda de hoy viene contradictoria, e invita a escuchar el silencio, a bailar con palabras, a querer al segundo casi más que al primero, a trabajar con arte y a que la historia se cuente como si fuera una historieta.

Shhhhhhhhh…si tenéis algo que decir, decidlo…pero bajito. Ya sabéis donde.

TEATRO

El juglar del Cid. Si los Monty Python son capaces de pariodar a Camelot, nosotros no vamos a ser menos con la historia de nuestro héroe medieval. Os aseguro agenderos que esta vez, El Cantar del Mio Cid, si que es una canción, y no un galimatias de palabrejas raras.

No obstante os aclaro que yo al Cid le tengo un poco de manía. Que sería muy fuerte y muy valiente, un hombre de honor y leal a su rey, pero vamos, nadie me negará que un poco cabezón si que era. Que ahí estaba la pobre Doña Jimena, que pasó de vestirse de luto a vestirse de novia en un minuto cuando se casó con él, el mismo causante de la muerte de su señor padre, pero en aquel tiempo, ¡qué no se haría por conseguir marido!. De todas formas la algarabía le duró poco, y -prepara Jimena la maleta porque nos vamos de destierro-, y ella, -bueno Rodrigo, así por fin tendremos una luna de miel. Pero ay mi Jimena, tu que ya te veías tomando el sol en tierras más cálidas que las de Castilla, resulta que a tu marido le da por ser un héroe y luchar contra los invasores...y ni viaje ni nada, directita a un convento, que él puede ser un golfo, pero tú, una dama y señora, tienes la obligación de conservar el decoro.

Total que mi Jimena se ve de pronto sola y el Cid que es un marido comprensivo, antes de partir a la guerra, va y le hace un hijo, pero claro, con ese poderío y como la guerra podía ser eterna, por si se te pasa el arroz Jimena, en vez de hacerte un hijo, mejor te hago de golpe dos. Y así fue, de aquella despedida nacieron dos preciosas niñas: Elvirita y Sol (entenderéis que para mí la heroína es Doña Jimena, que se pasó ocho años viviendo en un convento, sin más conversación que las amenas charlas que le dieran las monjas y sus mellizas).

Pero como no hay mal que cien años dure, el rey perdona al Cid y le dice: -aquí paz y después gloria, ala Rodrigo, que ya puedes volver. Pero el Cid, que como ya os he dicho era un cabezón, -que sí mi rey, que vuelvo, pero antes termino unos asuntos que tengo pendientes con los moros en Valencia.

- Jimena, Jimenita, te prometo que esta vez es la última, una batalla más y me tienes para siempre, de verdad de la buena.
- Rodrigo, ¡estoy muy harta! de las monjas, de las niñas, pero sobretodo estoy harta de tí. Te lo advierto, Rodrigo, o vienes ahora mismo, o no vuelvas jamás.


Y no volvió, porque el Cid se marchó a las Fallas y ahí se quedó (dicen que luchando incluso después de muerto). Ays...pobre doña Jimena.

El Cantar del Mio Cid...yo os lo he contado en esta agenda así, pero Israel Ruiz y Juan Manuel Cifuentes os lo contarán con mucho más humor (y música) en el Teatro Alfil (c/ Pez 10)

MÚSICA

Escucha el cine mudo. Puede parecer contradictorio que os invite a un evento musical que tiene como protagonista el cine. Y más contradictorio aún que os invite a escuchar algo que está mudo. Si, lo sé…pero un poquito de por favor ¿vale?.

En los comienzos del cine no se oía ni una palabra, pero en todas las proyecciones se contaba siempre con un piano que ambientaba las escenas de amor, de intriga, de terror. Con la llegada del sonido “dispararon al pianista” pero la música continuó sonando, y hoy no hay película que se precie que no tenga una banda sonora para recordar.

Agenderos, os propongo volver la vista atrás, y rememorar esa época en la que el cine comenzaba y era algo mágico, desconocido y sin igual. Para ello os propongo ir a ver una de las mejores cintas de cine mudo “El rostro pálido” protagonizada por uno de sus iconos: Buster Keaton. La música como antaño será en directo aunque los temas que se escucharán estarán más cerca de este siglo que del pasado.

Los artífices de tan singular idea son el grupo de jazz December Quintet. Ellos empezaron como un trío hace más de una década, pero como donde caben tres caben cuatro, pronto incorporaron a otro músico más a su formación. Pero claro, esto de ser pares debía de ser un rollo a la hora de votar el repertorio, y quizás por eso decidieron incorporar a un quinto en discordia que pusiera orden y acuerdo en las elecciones. Parece ser que les dio resultado, porque desde hace seis años son los que son y no parece que tengan intención de aumentar la familia.

El pase será el sábado 24 a las 17.30h y el domingo 25 a las 12.00h en el Caixaforum de Madrid (Pº del Prado 36). El precio de la entrada también es del pasado: cuatro euros.

Dicen que una imagen vale más que mil palabras, pero os aseguro que valdrá mucho más si se acompaña de sonidos

http://www.myspace.com/decemberquintet


DANZA

Nuevamente ante ti fascinado. Pues sí, lo reconozco. Me fascina ver como el cuerpo de un bailarín se mueve, como es capaz de elevarse en el aire y caer en el suelo sin que se rompa nada, como expresa emociones sin decir ni una sola palabra.

Como ya habréis notado, hoy estoy contradictoria y por eso, lo mismo os invito a escuchar una imagen que a oír un movimiento como ahora, ya que en este evento no sólo se baila sino que también se cuenta, entrelazando textos con las coreografías.

Un bailarín (Daniel Abreu) y un actor (Roberto Leal) representan, cada uno a su modo, el particular encuentro de dos amigos que hablan de sus anhelos, del amor, de su visión del mundo, de sus miserias y de sus éxitos.

Si, ya sé que los experimentos con gaseosa, pero dadles un voto de confianza aunque sólo sea porque el título resulta encantador.

Yo confesaré que no será “nuevamente” porque no he disfrutado aún de este ni de ningún espectáculo del coreógrafo, director y bailarín Daniel Abreu, pero no dudo de que nos fascinaremos mutuamente.

Será en la Sala Cuarta Pared (c/ Ercilla 17), el sábado 24 a las 21h, dentro del Festival “Territorio Danza”.

¿Os lo vais a perder?.


CINE

Actores secundarios del cine español. Los actores dicen que no hay papeles secundarios, sino interpretaciones secundarias. Y tienen razón.

A mi memoria acude la actuación de Judi Dench en Shakespeare in love. Sus ocho minutos de gloria como Isabel de Inglaterra le valieron un oscar y unas críticas más que elogiables. Tampoco puedo pasar por alto a ese “sospechoso habitual” que fue Kevin Spacey, porque para mí su actuación fue más principal que la de su protagonista (Gabriel Byrne). Seguramente Lo que el viento se llevó no hubiera sido lo mismo si “Mami” no le hubiera cortado la respiración con el corsé a una impertinente señorita sureña (por cierto, esta mami fue la primera actriz de color en conseguir una estatuilla de la academia). Y por supuesto, no olvidemos que Pe y Bardem pasarán a la historia por ser los primeros españoles en ganar el Oscar en la categoría de “actor y actriz de reparto” respectivamente.

Pero no hay que cruzar el charco para darse cuenta de la labor de estos, en mi opinión mal llamados, secundarios. Aquí, en mi querida España, esta España mía, esta España nuestra hay un amplio repertorio de ellos. Reconozco las caras de casi todos, pero peco a la hora de recordar sus nombres. No obstante, de uno sí que me acuerdo…y mucho. El genial Pepe Isbert, ese Isbert ya anciano, de voz ronca y casi inaudible que interpretaba magistralmente a sus personajes. ¿Cómo olvidar su actuación en El verdugo, La Gran Familia, o Bienvenido Mr Marshall?.

Pues para eso, para que no olvidemos su trabajo ni el de otros tantos actores de reparto, el Círculo de Bellas Artes, ha organizado un ciclo de cine dedicado a ellos. En total veinticuatro proyecciones.

Este fin de semana: Justino, un asesino de la 3ª edad (V y S), El mundo sigue (V y S); Plácido (S), Así es Madrid (D), El milagro de P. Tinto (D) y Ninette y un señor de Murcia (D).

La entrada: 4 euros, aunque aquí el precio es secundario ¿no?.


EXPOSICIONES

El oficio de mirar. Y es que mirar se convierte en oficio cuando se sabe dónde y cuando hay que captar lo mirado. Y el oficio se convierte en un arte cuando la imagen muestra más de lo que hay. Quizás por eso muchas de las fotografías que fueron tomadas en una jornada laboral cualquiera, se convierten con el paso del tiempo en una obra digna de volverse a ver.

Siempre que encuentro una exposición de este tipo me pregunto qué la hace tan valiosa. ¿El momento único que captó? ¿el personaje público fotografiado? ¿la técnica empleada? ¿la calidad de la imagen?.

Dice Cesar Lucas, fotógrafo desde hace más de cuatro décadas, que él nunca ha tenido más pretensión “que la de buscar la imagen que retratara el encargo como reportero que le había tocado cubrir”. Teniendo las cosas tan claras no me extraña que con 18 años realizara un reportaje al Che (Europa Press), que a los veintidós publicara en Life y a los veinticinco tuviera ya alguna que otra portada de la revista Match, y durante la década de los 60-70 se codeara con lo más granado de nuestra sociedad y flirteara con Hollywood. Pero a pesar de todos estos éxitos, para él su mejor época fue la de la Transición (algunas de sus fotos de esa época son ya míticas, como la de de unos jovencísimos Felipe González y Alfonso Guerra saludando desde una ventana tras ganar las elecciones del 82).

Por eso, el Museo de Arte Contemporáneo (Conde Duque 9) no ha dejado pasar la oportunidad y ha llenado sus salas con 120 de las mejores y más representativas fotografías de este hombre que hizo de su oficio un arte.


En fin parexelianos y gentes de otras galaxias, para no perder el hilo que reina en este día os diré que me alegro de que ¡por fin! tengamos al otoño (de lluvia y viento). Sí, lo sé, vosotros lo odiáis, pero vamos a intentarlo de nuevo a ver si conseguimos que alguno diga, ¡pues mira, me ha gustado este año! Para empezar, este fin de semana, nos dan una hora más…(¿no queríais arroz? Pues dos tazas). Y como siempre y por favor, mucho cuidado, que en esto de que no estéis el lunes no quiero ni una sola contradicción.

15 octubre, 2009

La Agenda en camiseta (¿cuanto llegará el frío?)

No es inútil viajar,
porque es cierto que todas las ciudades
amanecen de un modo parecido,
pero la noche llega en cada una
de manera distinta.
De día pueden verse
secretarias, conserjes, policías,
músicos callejeros y soldados,
dependientas que escuchan y sonríen,
oficinistas con olor a instancia,
conductores, extraños sacerdotes,
ejecutivos humillados.
Igual en todas partes,
porque apenas existen los kilómetros.
Pero existe la noche,
la soledad que borra los oficios
en un mundo habitado solamente
por hombres y mujeres,
confidencias de amarga valentía.

En las ciudades pueden encontrarse
relojes que se paran en la última copa,
la luna sobre un taxi
y todos los poemas que te escribo
(Luis García Montero, Completamente Viernes)



Estimados agenderos,

Este fin de semana os invito a viajar, a coger la maleta y a marcharos. Y si esto no es posible, os invito a viajar con la imaginación y a dibujar bocetos de todos los lugares que queréis visitar.

Para más invitaciones, este espacio. Ya sabéis donde.

CINE

Paris. Me pregunto qué pensará ese chico con el que me cruzo casi todas las mañanas. Creo que trabaja cerca de mi casa, quizás en ese bloque de oficinas que hay al lado de la plaza. ¿A qué se dedicará?. Hoy he descubierto que habla francés. Iba charlando por el móvil y al pasar por mi lado, lo he oído parlotear con una fluidez que me hace pensar que es de ese país. Me mira de reojo cuando nos cruzamos. Hasta mañana- decimos -aunque ninguno de los dos pronuncie esas palabras.

Llegando a Colón me cruzo con esa chica. Esa chica que gasta zapatos de charol y que adorna su cortísimo pelo con un detalle imposible (una flor, una diadema, unas horquillas…). Viste vaqueros casi siempre y aunque su estilo es descaradamente moderno, sus complementos son más propios del siglo XIX que de éste. Me mira, me reconoce y una fingida indiferencia nos invade a las dos. Hasta la vista- decimos- a pesar de que ninguna haya movido los labios para dejar salir esas palabras.

Ya casi llegando a la oficina me cruzo con el último de mis habituales. Me ve subir por Génova y yo a su vez lo veo bajar a él. Y de pronto la risa nos invade la cara: otra vez, otra vez tú. Él aminora el paso, como si quisiera alargar esos breves segundos en que su brazo y el mío coincidirán en el mismo plano, en el mismo espacio. Yo sin embargo lo acelero, porque me da vergüenza que me vea reírme de esta extraña y rutinaria coincidencia que tenemos todos los días. Que te vaya bonito- decimos- aunque ni él ni yo hayamos emitido ningún sonido.

Esta es la vida que veo cada mañana en mi paseo hacia el trabajo, e incluso a veces agenderos, me siento a contemplar el devenir de otras vidas sin ninguna intención de participar en ellas. Sólo quiero verlas pasar. Porque viendo otras vidas, entiendo un poquito más la mía.

Una ciudad (Paris) y un observador (un bailarín enfermo del corazón) que de pronto se para a mirarlo todo y a todos. Los críticos han dicho que “Paris” es una película perfecta para pasear por la ciudad de la luz. Película de esas en las que parece que no pasa nada, pero realmente son muchas las vidas y gentes que pasan por ella.

Si no sabéis qué hacer este fin de semana ¿qué tal si os dais una vuelta por esta ciudad idílica?.


New York, I Love you. Y de verdad de la verdura que I love you… aunque lo nuestro de momento sea un amor platónico. Pero ¿sabes? te prometo, te prometo, que cualquier día de estos me planto allí y te doy un beso. Y ya sabes que yo no soy de esas que no cumplen sus promesas.

Cualquier día de estos, me tienes por tus calles, por tus parques, o por tu magnifica biblioteca. Cualquier día de estos llego y te pido que me enseñes uno de tus bonitos bares de esos que salen en las películas, donde las parejas se lanzan miraditas, o se lanzan las bebidas a la cara. Cualquier día de estos te pido que me muestres la quinta avenida, me invites a un perrito y a un café en una esquina, y de pronto me digas una de esas frases que dicen ¿sólo? en las películas.

Si, cualquier día de estos me presento para que me descubras uno de tus teatros, y te pido que llueva a la salida y empezar a correr para ponerme a buen recaudo, y acabar empapada frente a un portal diciendo como dicen algunas (en las películas): ¿te apetece subir y tomarte algo?

Cualquier día de estos, llega la despedida, y llorando te digo, que la distancia no será el olvido, que te llevo en el alma, que lo nuestro es sincero, que hay un final feliz (como el de las películas) y que nuestra historia no se acaba aquí.

Y si acaba no importa, porque tengo otras once guardadas en la recámara. Once relatos de amor y desamor con un escenario común: Nueva York. Once directores que han dado su particular visión de esta ciudad y de las relaciones de pareja. Entre los protagonistas, Orlando Bloom, Ethan Hawke, William Hurt o Natalie Portman.


TEATRO

Direkta-Mente. ¿Os imagináis tener el poder de leer la mente? ¿Os imagináis lo que sería mirar a alguien a los ojos y saber lo que piensa? ¿Os imagináis que nadie tuviera secretos para nosotros?.

Yo de vez en cuando me lo imagino, y sinceramente, no quisiera tener tanto poder. Anticiparme a los deseos de alguien, saber de antemano, conocer el engaño, los sentimientos y las ilusiones de los demás, saber qué tengo que decir, saber qué quieren escuchar (¿estoy gorda cariño?, ¿te importa que me vaya de cañas con los amigotes amor?...). Repito, tanto poder me da vértigo….

Claro que si lo tuviera ¿rechazaría ese don de los dioses?. ¿Lo utilizaría en pro de la humanidad o caería en la tentación de sacarle un cuantioso beneficio?. Afortunadamente para mí y para vosotros (porque sí agenderos, yo sería de las que lo utilizaría en mi provecho…) carezco de este poder especial, y bastante tengo con entender lo que me dicen como para encima jugar a adivinar lo que “no me dicen”.

Quién dicen que sí que sabe mirar a los ojos y:- sé lo que estás pensando- es Luis Pardo. Claro que lo que no sabe Luis (¿o tal vez sí?) es que su éxito no radica en su poder, sino en el poder que creemos que tiene. Y claro, así cantamos como pajaritos todo lo que nos cruza por la mente.

De todas formas, no es mal chico este Luis, y para que no pensemos lo peor de él (tened en cuenta que aunque quisiéramos no se lo podríamos ocultar) nos aclara que en esto del mentalismo hay muy poquito de “don”, mucho de psicología y de quinesia (estudio de los movimientos corporales) y sobretodo grandes dosis de ilusionismo. ¡Pues me quedo mucho más tranquila, la verdad!.

Y si os queréis quedar tranquilos vosotros también os recomiendo ir a ver su espectáculo “mental” que se representa ahora en el Teatro Infanta Isabel (c/ Barquillo 24) hasta el próximo 25 Octubre.

Por cierto, que él si que utiliza sus poderes para hacer el bien, y por eso cada noche, uno de los asistentes a su espectáculo conseguirá renunciar al vicio de fumar. Eso es lo que este señor afirma.

Sí…sé lo que estáis pensando…

EXPOSICIONES

Escenografías. Hace años salí con un director de cine (si, a ver si os creéis que a mí lo de gafapastera me ha venido solo)… bueno para ser exactos, director, director no era, así que vuelvo a empezar.

Escenografías. Hace años salí con uno que para mi sorpresa y sobretodo para la suya, dirigió una película. Durante el proceso de creación que llevó desde que se le encendió la bombilla hasta que por fin se apagaron las luces de la sala, aprendí que no es oro todo lo que reluce, que no hay margen para la improvisación y que detrás de una película hay mucho trabajo (independientemente de que la cinta sea luego buena o mala).

Yo ya sabía que a la hora de hacer una película era fundamental que hubiera un director, un guionista, un productor, unos actores, un cámara, uno que entienda de sonido, otro que sepa montar bien las escenas, un maquillador, uno de vestuario…y otros muchos personajes catalogados como “ayudantes de…” o “técnicos en..”. Sabía todo esto y también que si no hay un buen guión, no vale de nada (o de casi nada) todo lo demás (aun recuerdo la magistral actuación de Santiago Ramos en Como un relámpago ¿y quién se acuerda de eso? probablemente él y yo…), porque lo que importa es la historia que se cuenta.

Sin embargo desconocía que un guión no sólo se escribe sino que además se pinta y que si no hay un buen cuadro, tampoco habrá una buena película. Total, que me enteré que antes de rodar, o tienes un storyboard (fotogramas retratados), o estás perdido. No importa que el dibujo no vaya a terminar en los desvanes del Prado, pero sí que refleje cómo será una escena, y la siguiente, y la siguiente. No importa que los colores elegidos no sean los más propicios, ni que la cara que se pinte no sea la que luego se vea en la pantalla…importa que cuando se oiga “acción” y el clic de la claqueta, todos sepan cómo, cuando y donde se desarrolla esa toma.

Pero claro, a veces hay quien no se conforma con hacer garabatos y “pinta” verdaderas obras de arte como es el caso de Fernando Sáenz. Y es que algunas películas no serían lo mismo si antes no hubieran pasado por sus lápices. ¿Quién si no imaginó ese pueblo tan peculiar y hoy aclamado de “Amanece que no es poco”?

En la Galería Multiplicidades (C/ Escalinata 1) se exponen estos días algunos de sus trabajos más representativos. Yo de vosotros no me lo perdería.

SECCIÓN LIBROS

El Barón Rampante. La semana pasada recuperé un CD que tenía olvidado y con él una canción más olvidada aún. La canción era "El reencuentro de Viola y el Barón", su autor Pedro Guerra (no quiero ni una risa) y está inspirada en la historia de “El Barón Rampante” de Italo Calvino. Y la canción me trajo a la memoria el libro y el libro a su vez me recordó esta sección taaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaan abandonada por sus colaboradores habituales.

Por eso, y para no descuidar el espacio dedicado al noble arte de la lectura, vuelvo a la carga y vuelvo a recomendaros un librito para esas tardes otoñales que tanto os gustan.

El Barón Rampante. Tres cosas me fascinaron de este cuento cuando lo leí. La primera, comprobar lo que los hombres son capaces de hacer por mantener sus convicciones (Cosimo se sube a un árbol para no tener que comer caracoles…y jura no poner nunca más los pies en la tierra) y la delgada línea que separa la rebeldía de la cabezonería. La segunda, que las vidas “no convencionales” pueden parecer más atractivas e intensas que las socialmente aceptadas, pero que éstas también cuentan con sus rutinas y sus desganas y que por eso, el placer de vivir no depende tanto de la vida que se tenga, sino de quién sea el que la viva. Y la tercera (esto es un descubrimiento reciente), que a veces podemos llevar esa vida “plena y realizada” que queremos porque tenemos al lado a alguien que se ocupa de las cosas mundanas que tanta pereza nos da hacer.

Por supuesto, y como no podía ser menos, este relato cuenta también con una historia de amor: la pasión entre el barón rebelde y una dama altanera que un día miró hacia arriba y subió (literalmente) al cielo.

Si queréis saber si fue un amor de altos vuelos o si Cosimo al final pisó el suelo, ya sabéis…abrid el libro y leed(lo).

Si alguien lo quiere está a su disposición (libro y canción).

En fin parexelianos y gentes de otras galaxias, alegrad esa cara, primero porque ¡por fin es viernes! y luego porque vuestros deseos se han hecho realidad: iel otoño de ahora no es otoño, es una primavera (¿será que vamos para atrás?). Así que ya sabéis, disfrutad de estos días, de la luz que aún nos queda, de salir a la calle, de mirar a otras vidas sin olvidarse de vivir la propia. Y como siempre y por favor, mucho cuidado, que si me falta alguno el lunes, me enfadaré, treparé a lo alto de un árbol y allí me quedaré.

09 octubre, 2009

La Agenda retrasada (lo siento)

La vida es mucho más pequeña que los sueños.
Rosa Montero



Estimados agenderos,

La vida es mucho más pequeña que los sueños, pero ¿no dicen que el tamaño no importa?...¿no dicen que la vida es sueño?...Sea como sea, disfrutadla.

Y si tenéis algo más que decir, decidlo. Ya sabéis donde.


CINE

Ágora. Comenzó estudiando a los clásicos, diseñando el hidrómetro, mejorando el astrolabio, corrigiendo las teorías de Euclides, dando clases en su propia casa, hablando en público, oponiéndose al patriarcado, interviniendo en la política municipal…hasta que pasó a ser una mujer visible…demasiado visible (Hilario J Rodriguez). Y tanto lo fue que la mataron. ¿Por qué? ¿Cuál fue el motivo que llevó a los hombres “de buena voluntad” a quitarle la vida a Hipatia?

Algunos historiadores abogan por motivos puramente religiosos (ser atea en un tiempo de creyentes no era lo más apropiado para conservar la cabeza), otros sin embargo apuestan por motivos académicos (maestra de filosofía en una escuela neoplatónica regentada por ella y muy concurrida). En lo que todos sin embargo coinciden, es que en esta época, la ausencia de fe y el tener ideas no estaba bien visto en una mujer. Suponía un peligro y por eso había que acabar con ella.

Hipatia no fue la primera ni lamentablemente la última víctima del fanatismo. Vengan de donde vengan (del espíritu o de la razón) las exaltaciones siempre se han llevado y se llevan a alguien por delante. De todas formas no caeré en demagogias diciendo que este acto es más vil porque se trate de una mujer, pero sí que diré que no lo es menos porque no haya sido un hombre el que muriese sino una fémina.

Hipatia, Hypatia…Acostumbraros a este nombre porque os vais a hartar de oírlo. La prueba más fehaciente es ver como han proliferado en los últimos días las biografías, ensayos y novelas que hablan de esta mujer egipcia, hija del matemático Teon, que enseñó públicamente la filosofía de Platón y de Aristóteles en Alejandría.

La culpa de todo esto no la tiene ella (aunque méritos no le faltan) sino él. Él que empezó escribiendo una tesis con la que nunca pensó que llegaría tan lejos y con la que abrió los ojos a los unos y a Los otros. Él, que pensó que este mundo se le quedaba pequeño y por eso tuvo que irse mar a dentro y quizás fuera esa la razón por la que “agora” apuesta por una superproducción digna de Hollywood pero que en realidad es patria. Una superproducción que cuenta con un elenco de estrellas internacionales delante de la cámara y un arsenal de profesionales nacionales detrás de ella.

Ágora, de Alejandro Amenábar se estrena hoy en nuestros cines. ¿Os lo vais a perder?

Por cierto, que dicen los que saben que Hipatia no murió ni tan joven (hay estudios que afirman que murió cerca de los setenta años) ni tan virgen. Lo comento por si alguno me lo reprocha después de acudir a verla y aprovecho además para recordarle que es tan sólo una película y que éstas no siempre tienen porqué ser fieles a la historia.

EXPOSICIONES

El esplendor de Alejandría. Ese vestido nos lo vamos a hacer, ¿verdad mamá?. Yo debía de tener unos diez años, y era la primera vez en mi vida que veía Lo que el Viento se Llevó y a Escarlata O’Hara moviendo aquellos metros de tul blanco con flores verdes. Me maravilló la suavidad con la que se balanceaban los volantes al andar, la elegancia de aquel sombrero de paja y la gracia de su sombrilla. ¿Cómo no iba a quererlo?.- Mamá, por favor, dime que nos lo haremos-. Claro que también quise luego emular a esta sureña arrancando las cortinas, pero eso no le hizo tanta gracia a mi señora madre como lo de hacernos un vestido.

Después de esto le propuse que nos hiciéramos el traje que llevaba Elizabeth Taylor en Ivanhoe, el que lucía Audrey Hepburn en Sabrina, el medieval conjunto de Olivia de Havilland en Robin Hood, y ya casi en la adolescencia quise que nos hiciéramos ese maravilloso diseño color marfil que llevaba Meryl Streep en Memorias de África. En definitiva, que película que veía, vestido que quería (y aún quiero agenderos, aún quiero). Sin embargo, y a pesar de mis súplicas nunca tuve delante de mí ninguno de aquellos preciosos modelitos.

Pero hoy, ¡el fregar se va a acabar!, digo, hoy ¡esto no me va a volver a pasar!. O por lo menos, no me va a pasar cuando vea Ágora. Porque si me gusta alguno de los trapitos que lleve Hipatia, tendré la posibilidad de verlos luego en vivo y en directo.

El museo del Traje (c/Juan de Herrera 2) con su exposición El esplendor de Alejandría nos permite disfrutar de los diseños que la ganadora de un Oscar Gabrilla Pescucci ha realizado para la última película de Amenábar. Me quedo mucho más tranquila. Ya no tendré que decir eso de ¿nos hacemos este vestido?...simplemente iré allí y lo cogeré (señores vigilantes, confío en su magnánima misericordia….)

Por cierto, la moda de hace 1700 años estará sólo hasta el 25 de Octubre, así que no os lo penséis mucho.

FERIAS

XXI Feria de Otoño del Libro Viejo y Antiguo. Agenderos, cuando pensé en escribir sobre este evento, no tenía claro si encuadrarlo en la sección Cultura o en la de Deportes. Sé que más de uno estará alzando una ceja y pensando: ¿con qué me irá a salir ahora esta loca? ¿Deporte una feria de libros? ¡y de libros antiguos además!.

Tranquilidad en el frente, porque mi locura no ha aumentado ni un ápice (o por lo menos no en los temas de agenda), pero tengo que deciros que todo aquel que decida ir a esta feria, participará en una animada y excitante gymkana.

Si no habéis visto el paseo de Recoletos recientemente no sabréis de qué estoy hablando….porque ahora este lugar ¡es la ¡guerra! Y mira que no dudo de que vaya a quedar bonito, ¡qué digo bonito! precioso, grandioso, magnifico….pero mientras, ¡a las barricadas, a las barricadas!

Y ahí, en medio de esta batalla, en medio de las zanjas, los agujeros y las baldosas quitadas, surgen, como arma letal para el olvido, las letras, las palabras…los libros. Y ya puede caer quien caiga, que mientras haya ejemplares pasados o descatalogados, y algún que otro “guerrillero” interesado en comprarlos, habrá casetas.

Tengo debilidad por esta feria, porque es la prueba de que los libros no deben estar en las estanterías acumulando polvo sino que deben ser un objeto vivo, pasando de mano en mano, como la falsa moneda.

Las trincheras estarán abiertas hasta el próximo día 18 de Octubre.


MÚSICA

Pequeña Piltrafas. Se comenta, se dice, se escucha que en Madrid no hay cultura musical, que los locales son bares o salas de concierto, pero que ninguno sabe elegir con acierto esa combinación que supone ir a tomar una cerveza y escuchar un directo.

Se escucha, se comenta, se dice que en Madrid la música se pincha (y con saña), porque nadie se mueve si en lugar de una mesa de mezclas lo que se encuentra es cantando a cualquier melenas. O se baila o se escucha, pero no las dos cosas a la vez.

Se dice, se escucha, se comenta que a veces en Madrid ocurren los milagros, y de pronto, lo que parecía imposible es ahora cierto, una birra en la mano, un amigo a tu lado, y un grupo que canta en directo sobre un improvisado escenario.

Ni es pequeña, ni tampoco una piltrafa. Si queréis comprobarlo, acudid el sábado al Café La Palma (c/ La Palma 62). Siete euros, hay venta anticipada y la hora no es tarde ni tampoco temprana (22.00H)

www.myspace.com/pequeniapiltrafas


OTRAS SECCIONES

Semana de la Arquitectura. Si hay algo que me gusta más que los “días de” o las “noches d” son las “semanas de”. Es el paraíso de las dedicatorias, siete jornadas destinadas a una única causa.

Y yo me pregunto, ¿qué es lo que tiene que tener lo conmemorado para que se le dedique tanto tiempo? ¿Por qué sólo tenemos un día dedicado a la música y sin embargo tenemos una semana entera dedicada al corazón? ¿Por qué el teatro se merece un solitario día en el calendario y en cambio a otras artes se les dedica siete?.

No creo que sea porque a uno se le considere más meritorio que al otro, ni tampoco porque los asistentes semanales necesiten de más de un acto para captar la idea. ¿Entonces?.

Por favor, si alguien conoce la respuesta, la clara diferencia para que unos trabajen de lunes a domingo y otros sin embargo se ganen el respeto sólo con un jornal, que nos lo diga ahora, porque estamos en ascuas.

Mientras encontramos a esa mente maravillosa que resuelva el problema, permitidme contaros que esta semana, es “una semana D” y aunque llegamos tarde, y para nosotros sólo sea ya “un fin de semana d” espero que disfrutéis de lo que aún nos queda.

Agenderos, será porque lo tengo cerca o porque todos los años quiero ir y no puedo, pero el caso es que me encanta la Semana de la Arquitectura (y eso que los horarios no son aptos para aquellos que trabajamos y eso que los grupos son muchas veces tan reducidos que casi casi desaparecen, y eso que no se le da todo el bombo y platillo que se le debería)…pero el poder entrar a esos edificios vetados durante todo el año, qué queréis que os diga…a mí como que me pone (si es que las cosas prohibidas tiran…de todos es sabido).

Este viernes, y si os dais prisa, aun podéis disfrutar de la Torre BBVA en una visita guiada por estudiantes de arquitectura (hasta las 18.00h) y si a eso no llegáis, tal vez queráis volver a la universidad, a la Facultad de Filología (sede principal) que estará abierta hasta las ocho. Y como la tentación dicen que se evita cayendo en ella o con el rezo, agenderos…rezad (pero tenéis poco tiempo, hasta las seis y media) en la Iglesia de Sta Ana y la Esperanza (c/ Cañada 35)

El sábado hay varias rutas guiadas, que si por Carabanchel, que si por las zonas verdes, que si por el barrio de Tetuán, e incluso hay varias excursiones por los pueblos de Madrid. Si no sois de los que os guste andar, tenéis exposiciones, charlas y conferencias sobre la materia.

El domingo se acabó lo que se daba, pero aún podéis andar (pero poco porque está todo en obras) por el Paseo del Prado, y también por los alrededores del barrio de Hortaleza.

Dos sitios para enterarse de todo www.fundacioncoam.es


En fin parexelianos y gentes de otras galaxias, no dejéis que nadie os diga que no estáis en lo cierto si de verdad creeis en ello, ni perdáis la ilusión que tenias de niños, ni dejéis de lado las buenas cosas aunque sean viejas o antiguas, ni tampoco os fiéis de las apariencias, porque a veces para conocer, lo mejor es verlo desde dentro. Y como siempre y por favor, mucho cuidado, que son tres en vez de dos los días de descanso y si me falta alguien a la vuelta, seré yo la que me tire por el puente.

01 octubre, 2009

La Agenda Pedalea

¿Por qué en los días de lluvia cruza una bicicleta
en silencio por nuestro corazón?”

Ángel González


Estimados agenderos:

La respuesta es sencilla: porque en los días de lluvia a nadie le apetece estar de fiesta. Es mejor andar lánguido y malhumorado por la calle, que pensar en sacar el paraguas y cantar. Y como deduzco por vuestras caras que mojarse tampoco es una opción, os propongo que os quedéis en casa calladitos pedaleando sobre una bicicleta estática.

A mí sin embargo, como me gusta la lluvia, os digo todo lo que haré.

Y si tenéis algo que decir (a favor o en contra) decidlo. Ya sabéis donde.

DEPORTE

Fiesta de la bicicleta. Leo en el periódico que para la primavera del 2011 Madrid, al igual que otras ciudades españolas, dispondrá de bicis de alquiler dentro de un programa de movilidad para la zona centro y aledaños. Leo también que para ser usuario, se deberá tener más de 16 años, ser titular de una tarjeta bancaria, estar inscrito en el club ciclista Mybici y blablabla….

….Blablabla y más blablabla porque este cuento ya lo he oído muchas veces, pero lo cierto, la cruda realidad no es otra que una cuota de movilidad en bici de un 0.1%. Como me lo contaron os lo cuento, un tristísimo 0.1% que es una manera fina y elegante de decir que este medio de transporte es tan utilizado en nuestra ciudad como el carromato, la lancha o el trineo tirado por renos.

Yo de vez en cuando intento subir el porcentaje y me animo a pedalear por las mañanas para ir a trabajar, pero claro, soy una cobarde y a la mínima contrariedad aparco el pedaleo por el coche de San Fernando, que quieras que no, me ofrece más garantías. Sin embargo reconozco que si fuéramos más los que nos atreviéramos a coger la bici, quizás tal vez tuviéramos la fuerza necesaria para reclamar un carril (por cierto ¿por qué en Serrano se ha desestimado hacer uno ahora que están remodelando la calle…? Y lo mismo digo para otras vías como la Castellana o Recoletos.). Quizás si fuéramos más los que pedaleáramos habitualmente, lograríamos que la bici fuera vista como un medio habitual en el que viajar y no como un billete hacia la temeridad.

Por eso agradezco las iniciativas que están llevando a cabo asociaciones como BiciCritica (todos los últimos jueves de mes, a las ocho en Cibeles) o Pedalibre para conseguir un espacio seguro (¡carril bici ya!) por el que circular.

Ellas realizan cada día un trabajo de fondo (¡carril bici! ¡carril bici! señor alcalde…carril bici ¿me pones un carril bici? precaución señor conductor…que como no tengo carril….¿y el carril bici para cuando?) y por eso se merecen una fiesta. Se merecen que por un día el coger la bicicleta no sea una locura, sino un placer.

Y ese día es este domingo 4 de octubre. A la nueve de la mañana en la confluencia de las calles Ibiza y Menedez Pelayo, dará comienzo el paseo. AVISO, ¡hay que inscribirse! Y es gratuito. Lo podéis hacer desde Internet e imprimiros vosotros mismos vuestro dorsal. No hay excusas, hay que contabilizar cuantos somos por motivos de seguridad y de promoción y también porque si no tenéis número no podréis entrar en los sorteos. Hacedlo antes de las 24.00h del día 3 de Octubre.

Aquí os dejo la web donde encontraréis toda la información necesaria (inscripción, premios, ruta…ect) Inscribete


Porque las bicicletas no son sólo para el verano, animaos y acudid a este jolgorio.

Y si la animación os dura más rato, y queréis ser de los que pedalean también durante los días no festivos, no olvidéis los diez mandamientos del ciclista urbano:

1. Circula por el centro de tu carril
2. En las intersecciones con desvío a la derecha, ocupa la izquierda de tu carril.
3. Respeta las normas, pero reinterprétalas siempre que ello mejore tu seguridad.
4. Nunca bajes la guardia.
5. No te sientas ridículo ni "un bicho raro".
6. Contrata un seguro de responsabilidad civil.
7. No circules por los aparcamientos de los hipermercados.
8. Lleva los frenos en perfecto estado.
9. Ponle luz a tu bici
10. No adelantes autobuses si no lo ves muy claro.


CINE

Si la cosa funciona. Pues eso, que si la cosa funciona, ¿para qué tocarla?. A Woody Allen siempre le habían funcionado las historias neuróticas de amor y desamor, donde todo se cuestiona a la sombra de los edificios de Manhattan.

Pero claro, desde que el hombre es hombre su filosofía ha sido: sí, si funcionar ¡funciona!…pero ¿se puede mejorar?. Y por eso, porque no sabemos estarnos quietecitos, se innova, se cambian los esquemas, los programas informáticos, los escenarios, los equipos, las ideas, e incluso se cambia a las personas…

Así que siguiendo esta corriente de pensamiento, nuestro Woody decidió un buen día hacer las maletas, cruzar el charco e instalarse en otra tierra para rodar sus películas. Y la verdad es que logró que la cosa funcionara, llevándose el punto y el partido con la inquietante “Match point”. Pero claro, ganar una vez, no significa que se gane siempre y por eso las siguientes cintas rodadas en Londres no obtuvieron los laureles (ni de crítica ni de público) de la primera.

Sin embargo, la filosofía también dice que si la cosa no funciona, lo mejor es no insistir y cambiar de camino. Así que nuestro Woody, volvió a hacer las maletas, cruzó un marecillo y se instaló en otra ciudad europea para rodar de nuevo. No podemos decir que el éxito le diera la espalda, pero tampoco lo abrazó efusivamente (aunque Pe si que abrazara el Oscar por su actuación).

Dicen que después de esto nuestro Woody se lo tomó con filosofía y siguiendo el consejo de “vuelve ha empezar donde lo dejaste”, hizo otra vez las maletas, cruzó el charco y regresó a la ciudad y a las historias que tantas alegrías (cinematográficamente hablando) le habían dado. No se equivocó.

Si la cosa funciona reúne todo lo que se espera de una película de Woody: humor, neurosis, parejas, ex parejas…personajes imposibles que no lo parecen tanto de la mano de este director..y sobre todo, Nueva York.

Así que agenderos, si funcionó antes ¿Por qué no va a hacerlo ahora?. Yo pienso ir a comprobarlo. ¿Vosotros?

Por cierto, os aseguro que funciona muchísimo mejor en su versión original.


TEATRO

La felicidad de las mujeres. Vale, vale, lo reconozco, quizás exageré un poquito la semana pasada al decir que las mujeres nos encontramos “un poco desesperadas, un mucho frustradas…y como siempre insatisfechas”. Pero es que la semana pasada no contaba con la información que tengo ésta y de ahí mis palabras. Ahora ya sé que las mujeres somos felices cual perdices…y lo que es más importante…sé el porqué.

Claro que a mí me ha sorprendido un poco encontrarme con que ese oscuro objeto del deseo, ese que compensará todas nuestras penas y garantizará nuestra alegría de por vida, no es otra cosa que ¡un coche!.

Veo que los varones están aplaudiendo y gritando como locos ¡por fin, por fin mi churri entiende por qué paso horas y horas con la cabeza metida en el motor (en vez de tenerla metida en otro sitio)!. ¡Por fin comprende los mimos, cuidados y dedicación que le doy al carro en vez de a ella!. ¡Por fin entiende que sea capaz de ver un mínimo golpecito a quinientos metros de distancia y sin embargo no me de ni cuenta de que ella ha ido a la peluquería!…En definitiva, ¡qué ahora sí que sabe porqué MI coche me hace tan feliz!.

Antes de que la euforia se desboque, aclararé que el coche que tan feliz hace a las mujeres es un deportivo ideal de la muerte valorado en unos cien mil euros (vamos, ni que fuera el de Alonso…con Alonso dentro). Si va a tener razón Albert Camus cuando dijo que “la felicidad está sobrevalorada en nuestros días”

Sobre la felicidad, su búsqueda y las artimañas a las que se recurre para conseguirla es de lo que trata esta obra que se representa en el teatro Alfil (c/ Pez 10). Roberto Santiago, conocido por sus trabajos como director en el cine (Al fin del Camino, el penalti más largo del mundo…) cambia de escenario, abandonando la cámara por el bolígrafo y relatando las andanzas de tres mujeres del siglo XXI.


EXPOSICIONES

Identidades. Pues yo también me subo al carro y dado que esta agenda es una publicación de interés público preocupada por la actualidad más actual, no me queda más remedio que dedicar unas líneas a la foto más vista (con y sin pixeles) de las últimas semanas. No entraré en el debate de si debió o no aparecer en los medios, ni tampoco hablaremos de cómo es la mejor forma de proteger a un menor, ni mucho menos de si fue o no acertada la vestimenta. No, eso se lo dejo a otros tertulianos a los que les gusta chillarse y a los columnistas a los que les encanta leerse. Aquí agenderos vamos a poner el dedo en la llaga y a preguntar lo que de verdad nos interesa:

- PERO, ¿a qué tribu urbana pertenecen?, ¿seguirán vistiendo así cuando se les pase la euforia adolescente? ¿Rebeldes con o sin causa? ¿Dónde se compran esas túnicas? ¿Fue sólo para la ocasión o es su look habitual?.

De todas formas, yo no me escandalizaría demasiado aunque sean hijas de quien son, porque cada quién tiene (o ha tenido) una joyita de este percal en casa. A mi padre le ha tocado en gracia una hippiosa como yo, otros tuvieron que ensanchar el marco de las puertas para que pasara su niña con esas faldas de cancan de los años cincuenta, los hay que cambiaron las lámparas por plafones para que su angelito punk no las golpeara con la cresta, y más de un padre tuvo que aprender técnicas de socorrismo para reanimar a todo aquel que se topara en el pasillo con su retoño y su camiseta de monstruos fluorescentes.

Por eso y visto lo visto, si de verdad interesan las fotos de adolescentes en busca de una identidad, os anuncio que yo tengo 116 para mostraros y mucho mejores que ésta. Bueno exactamente yo no, porque quien las tiene es la Sala de Exposiciones Canal de Isabel II, pero si sois buenos y no armáis bulla en la puerta, o las dejarán ver.

El fotógrafo Miguel Trillo se ha pasado más de de tres décadas detrás de una cámara retratando a los jóvenes (y jóvenas) de todas partes del mundo. Con una estética similar (un muro al fondo de la imagen) consuela comprobar que aunque pasen los años, los pipiolos son y siempre serán eso…pipiolos con ganas de comerse el mundo, con ganas de marcar la diferencia y con pretensiones de manifestar su rebeldía a través de su vestimenta. Y es que como dice Miguel Trillo, un joven te puede mentir con la palabra, pero no con la ropa…la ropa le delata. Y mucho.

Pues ya sabéis, si queréis oír confesiones de todo tipo, acudid a esta sala.

OTRAS SECCIONES

Widgetización. Podría deciros que sé de qué va esto, pero os mentiría vilmente. Las cuestiones técnicas del blog le corresponden a Dani, y como a él no le para el pensamiento (si, Dani se ha dejado llevar por la corriente de funciona pero se puede mejorar) quiere que ¡Por fin es viernes! esté en todos teléfonos móviles.

Por favor, en este caso vuestros comentarios son más necesarios que nunca, ya que así sabremos si habéis tenido problemas al widgetiaros, si pensáis que estamos locos, si creéis que el móvil estallará….

Las explicaciones de cómo y porqué se las dejo a nuestro experto:

Todos los grandes comunicadores de hoy en día se están pasando a la “multi-plataforma”. No basta con aparecer sólo en un canal, tienes que ser visible en todos: prensa, radio, televisión, Internet, etc. Así que Elia no podía ser una excepción. Ahora mismo está en una dura batalla legal con Ana Rosa Quintana por conseguir una licencia de TDT en Madrid, pero mientras este tema se resuelve, Elia se pone un paso por delante y salta con fuerza a la plataforma móvil.

En resumen, que el blog de La Agenda Semanal ya está disponible para teléfonos móviles. Hay que reconocer que sólo es para algunos modelos de teléfono y que requiere un poco de esfuerzo para instalar un software en el terminal, pero al fin y al cabo es un buen comienzo. Funciona con cualquier operador móvil, aunque está optimizado para Vodafone, ya que se ha hecho con su servicio público y gratuito de “widgets” (pequeños programitas para el teléfono que acceden a Internet). Aquí os cuento los dos pasos requeridos para disponer del widget de La Agenda Semanal en vuestro teléfono:

Version A (si tienes Vodafone)

Paso 1 – Descárgate al teléfono desde aquí el Gestor de Widgets de Vodafone, si tu modelo de teléfono es compatible. Basta con indicar tu número y te llega un SMS para hacer la descarga.

Paso 2 - Descárgate en el teléfono el widget de La Agenda Semanal. Para ello, sólo tienes que ejecutar en tu propio teléfono el gestor que te acabas de instalar, meterte en la tienda “Apps Shop”, pinchar en “Buscar” y teclear “semanal”. Te aparecerá La Agenda Semanal, la pinchas y escoges “Instalar App”. A partir de entonces ya la tendrás siempre disponible.

Version B (si tienes otro operador)

Paso 1 – Descárgate en el teléfono desde aquí el gestor Opera Widgets for S60, si tu modelo de teléfono es compatible. En este caso el mecanismo es bajarte el fichero a tu PC y luego instalarlo en el móvil con un cable de datos y el programa apropiado (p.e. Nokia PC suite).

Paso 2 - Descárgate en el teléfono desde aquí el widget de La Agenda Semanal. Tienes que descargar un fichero en tu PC y desde allí mandarlo por Bluetooth a tu teléfono (suena complicado pero se puede hacer mediante la opción “Enviar a” que sale con el botón derecho del ratón). Cuando el teléfono recibe el fichero, todo es automático: dices que sí y ya está.

Al fin, si todo va como tiene que ir, ¡disfruta del blog en tu propio móvil! Si por el contrario la maligna tecnología es esquiva con tus esfuerzos de forma que tus intentos de instalación no culminan con el merecido éxito, no dudes en pedir ayuda a
agendasemanal@gmail.com

Por otro lado, también tienes que ser consciente de las características del medio móvil con respecto a la versión normal de Internet desde un PC:
  • La versión móvil del blog tiene un formato distinto, más reducido y sencillo. No tiene fondo con colorines vistosos y se pierden los comentarios, los videos y los enlaces auxiliares de la página. En resumen, sólo visualiza texto y fotos.
  • El uso del widget de La Agenda Semanal implica un acceso a Internet y está sujeto a las tarifas de datos que tengas con el operador. Son muy pocos kilobytes, pero aparecerán reflejados en tu factura salvo que tengas tarifa plana de datos.

¡Bienvenido a la widgetización de La Agenda Semanal
!

En fin parexelianos y gentes de otras galaxias, ¿a quién le importa lo que yo diga? ¿a quién le importa lo que yo haga? Yo soy así (vista como vista) y así seguiré, ¡nunca cambiaré! (porque si la cosa funciona, ¿para qué?) O puede que tal vez sí, nunca se sabe, lo que ahora me hace feliz puede que al rato se haya ido en bicicleta... Asi que estad atentos, porque las cosas cambian qué es una barbaridad y lo que empezó siendo un mail….¡fíjate tú! ahora es un widget. Y como siempre y por favor, mucho cuidado, que ya sabéis que el teneros ahí me hace feliz, ayer, hoy y siempre.