La Agenda deja su huella

“Si supiera lo que íbamos a encontrar,
no me molestaría en buscarlo”
(Jaques Cousteau)


Estimados agenderos,

Si ellos hubieran sabido que iban a ganar ese partido, tal vez no hubieran puesto tanto empeño en jugarlo ni hubiera sido tan meritoria su victoria. Si ella conociese de antemano quién está al otro lado de la red, no pondría tanto interés en saber todo de él. Si mis pies encontraran siempre unos zapatos que les cuadraseen, no dejarían entonces una huella imborrable en cada zapatería. Y si os sigo contando lo que cuenta la agenda, no os molestaréis ni siquiera en leerla..

Así que, leed.

Para las protestas ya sabéis donde.


EXPOSICIONES

El zapato, una huella para la historia. Agenderos, pensaba que era un caso especial, y que las dificultades a la hora de calzarse sólo las tenía yo, pero después de un día de compras con amigas, digo con cierta tranquilidad, que da igual el número que se tenga, porque siempre dará problemas. Que si tengo un número muy común (38)y por eso se agota en seguida (dicho por “una amiga”), que si tengo un número muy pequeño (34) y por eso no lo tienen en casi ninguna zapatería (dicho por “otra amiga”), que si tengo un número diferente en cada pie (32 y 30) y encima son los dos enanos (dicho por mí). Total que sea por defecto, exceso o variedad, el caso es que salir a comprar zapatos es una cruz para todo el mundo. Y no digo ya nada de la penitencia que es pagar su precio, aunque a veces pagaríamos gustosos las cantidades indecentes que nos piden si encontráramos lo que estamos buscando.

¡Lo que daría yo por tener un hada madrina que se presentara con unos zapatitos de mi numero cada vez que tengo un sarao!

Sin embargo, y a pesar de los pesares, yo no veo que nadie de los que protestamos vayamos descalzos por la vida. Es cierto que ahora el zapato no sólo es un elemento para proteger los pies del frío o de la dureza del suelo, que se ha convertido en un complemento indispensable en la moda (además de en un objeto de culto y colección) y que por eso nos molesta "llevar cualquier cosa", pero si volvemos la vista atrás veremos que hace no mucho tener zapatos significaba tener un status social, ser “alguien” en el mundillo político y social. Vamos, que más o menos lo que es hoy conducir un ferrari..¡un poderío!

En definitiva, que los zapatos tanto ayer como hoy dan mucha guerra, digo, tienen su historia. Y que si queréis saberla, no tenéis más que ir al Centro Comercial Gran Vía Hortaleza. Allí 122 piezas cedidas por el museo del calzado de Elda os la contarán hasta el 13 de febrero.

Ojo con probarse algún par!. Que son piezas de coleccionista.


TEATRO

Experiencias con un desconocido show, de Sònia Gómez. No sé si habéis visto los anuncios que hay ahora sobre el uso correcto de Internet, sobre lo que se debe o no colgar en el ciberespacio y sobre a quién o a quienes les tenemos que contar nuestras intimidades. La verdad es que me parecen de lo más acertado, porque aunque las posibilidades de este medio son infinitas, también lo son las de su uso indebido. Así que ..¡cuidadito!

Como estamos en confianza y no nos oye nadie, voy a lanzar esta pregunta, ¿habéis entablado amistad alguna vez con desconocidos a través de la red? ¿No? ¿Cómo qué no? Pero ¿en qué mundo vivís? ¿que es peligroso, y que sólo se conectan pirados? Sinceramente, no quiero yo contradeciros, pero a mí me parecen más peligrosos los buitres nocturnos que rondan algunas barras de bar que los cibernáutas, pero bueno.

Vale, voy a lanzar otra sonda-globo, ¿estáis en alguna red social? ¿Cómo que no? Pero ¿de donde salís?, ¿no recibís invitaciones de gentes a las que ni recordáis para ser “amigos” suyos? ¿No os invitan a grupos tan interesantes como “a mí también me gusta el cristasol”?. Definitivamente, no doy crédito.

Porque aunque vosotros lo neguéis, sé que tarde o temprano caeréis en este universo e incluso puede que escribais un libro acerca de vuestras experiencias ciberespaciales o hagáis un show televisivo imaginario, como es el caso de Sònia Gómez, que menuda monta ella con su email.

Por sólo 3 euritos (que estamos en crisis agenderos) y en la Casa Encendida, podréis disfrutar de esta original propuesta, mezcla de teatro y danza dentro del Festival Escena Contemporánea. La luz de esta casa se encenderá a las 22.00h.


Brokers. A pesar de las explicaciones de los expertos, nunca he podido entender cual es el mecanismo que hace funcionar la Bolsa, ni qué significan esos numerajos en una pantalla, ni mucho menos logro saber por qué no se está quieta, que un día estamos eufóricos y de repente al siguiente se produce la catástrofe (que estos cambios, no pueden ser buenos para la salud, digo yo). Como no lo entiendo, no invierto en ella ni compro acciones ni nada que se le parezca. Mi única “acción” es estarme quietecita, porque sinceramente, para jugarme el dinero así sin ton ni son mejor me voy al casino que por lo menos me divierto viendo girar la ruleta.

Otra razón más para no darla ni un duro, es que lo poco que sé de ella, me da miedo. Eso de que “la bolsa” sea el referente mundial de la economía (¿pero como puede ser referente algo que cada día cambia, algo que es inestable?) pues como que no me inspira mucha confianza. Tampoco me agrada saber que sube y baja en función de la rumorología de pasillos y de que si una bolsa se tira por un puente, pues allá van todas.

Y qué decir ya de los que trabajan en ella, todo el día dando gritos, apretujados los unos contra los otros, haciendo señas como estuvieran jugando al mus. Ese no es un ambiente sano. Los de su comité de higiene y seguridad deberían tomar medidas ya. (De todas formas, dicen que ahora con las nuevas tecnologías, las bolsas se están quedando vacías de gente y que todo se hace a través del ordenador y/o del móvil. ¡Pues tampoco me gusta!. Que un día se cae la red y ya tenemos un nuevo Crack).

No obstante, no hay que negar la evidencia, y puesto que mi futuro económico depende de que el IBEX vaya para un lado o para el otro, me he propuesto poner todo de mi parte para entender, saber y ¡a jugar!

Por eso, empezaré acudiendo a las clases que la compañía Yllana están dando ahora en los Teatros del Canal (c/Cea Bermúdez 1). Ellos sí que saben como enganchar a los alumnos reticentes como yo y hacerles comprender los entresijos bursátiles. Y eso lo hacen sin decir ni una sola palabra, a golpe de gesticulación, que para eso son “Brokers”.

El curso sólo dura hasta el 14 de febrero.


CINE

Invictus. Dicen que hay pasiones que matan, pero qué duda cabe de que también hay otras que unen y logran lo que no se había logrado antes. Y es que ya se sabe que cuando las heridas son difíciles de curar, no hay que descartar ningún remedio, por muy peregrino que éste nos parezca. Cuando en un pueblo hay vencedores y vencidos, hacer olvidar quién es quien resulta casi imposible. Casi…

..porque la historia nos enseña que a veces se ha conseguido, y que la única dificultad para lograrlo es encontrar la manera de hacerlo. En unos casos se recurre a la buena voluntad de las partes…”borrón y cuenta nueva” que dicen, pero por desgracia puede ocurrir que en los dos lados haya quien no sepa sumar y que además se niegue a aprender, por lo que no siempre se puede administrar esta pócima. Otras veces, y recurriendo al dicho de que quien canta sus males espanta, lo que se busca es encontrar una canción que entonen todos (aquí como no nos poníamos de acuerdo en la letra, hemos dejado sólo la música, pero oye, que la tarareamos fenomenal).

Sin embargo hay que reconocer que nada une tanto como el deporte de equipo y dentro de éste, nada nos hace sentirnos mejor que “nuestra selección” (claro que sólo cuando gana porque si pierde, ays si pierde, entonces nadie quiere ser de ella). A las pruebas me remito, nunca hemos sido tan rojos como cuando ganamos la Eurocopa y nunca nos hemos enorgullecido tanto de nuestra Ñ como cuando ganamos el Mundobasket. Ya nadie se avergüenza cuando oye “soy español, español, español” y nunca se ha dicho tan alto eso de que “Spain is different”.

Así que agenderos, no creáis que la historia que llega a nuestras pantallas de la mano de Clint Eastwood es un cuento, porque está basada en hechos reales (además de en un libro, “El factor humanoo”). En este caso el deporte que auna vítores es el rubby (que tiene también sus adeptos) y la herida a curar no es otra que la de 50 años Apartheid.

Un presidente, una selección, un campeonato y un partido, hicieron lo que horas y horas de despacho no lograron. Unir a un país. Y es que ser del mismo equipo hace olvidar las diferencias, por muy irreconciliables que parezcan. (video)

Algunos pensaréis que a Eastwood le ha dado últimamente por hablar de deportes un tanto violentos, pero ¡qué queréis! si fue el más “sucio” de todos los polis y el más duro de todos los sargentos, pero no olvidéis que aunque fue todo esto, ahora también es tierno, sensible y humano. Y esta combinación le está dando magníficos resultados.

En esta ocasión cuenta con Matt Dammon, nominado al oscar al mejor actor secundario por su interpretación del capitán de la selección de rubby sudafricana y con Morgan Freeman en el papel de Mandela.

Ni que decir tiene que este partido es de lo más original así que ¡que no os la metan doblada! (he leído que Freeman se mimetiza de tal manera que hasta la manera de hablar es igual que la de Mandela, cosa que no se aprecia en el doblaje).

Espero con esta recomendación salir invicta…


Hammer Film. Reconozco que a mí las películas de terror no me van mucho. ¿Por qué sufrir un ataque cardiaco en cada escena? ¿Por qué pasar miedo durante y después de verla?. ¿Pagar siete euros para estar todo el rato con los ojos cerrados y la cabeza entre las piernas diciendo: -avísame cuando acabe?.

Sin embargo hay a quienes el terror les chifla y necesitan como el comer los subidones de adrenalina que da el ver a un vampiro a punto de morder un cuello o a seres infrahumanos saliendo de sus escondites. Y no deben de ser pocos porque cuando he empezado a rebuscar, me he topado con toda una saga de películas de Drácula, de Hombres lobos lunáticos, de Frankestein perdiendo tornillos, de zombies que regresan del más allá...e incluso me he dado de narices con una productora (Hammer productions) que se ha dedicado a hacer las delicias de todos estos fanáticos del cine de terror y ciencia ficción.

Fundada en 1934, su época dorada llegó en los años sesenta cuando produjo “Los Experimentos del Dr Quatermass” y todos los expertos reconocen que ningún Drácula fue más chupóptero que el que ellos crearon con la cara de Christopher Lee.

A todos aquellos a los que les encante este terror (hoy, para qué negarlo, un poco menos terrorífico), les dedico este evento y esta recomendación. En el Círculo de Bellas Artes desde el pasado miércoles y hasta el bonito día de San Valentín, se podrán ver perlas como “Las novias de Drácula”, “La maldición del Hombre Lobo”, “El Dr Jekyll y su hermana Hyde” o “el Experimento del Dr Quatermass”. La entrada sólo cuesta 5 euros

Para qué podáis saber el día y la hora:

circulobellasartes

En fin parexelianos y gentes de otras galaxias, ya sabéis que intento encontrar cada semana la horma justa de vuestro zapato, salir victoriosa en cada evento o al menos no perder como en la bolsa. Leo agendas pasadas y sinceramente, me doy miedo, porque son casi cuatro años escribiendo y poniéndonos en contacto a través del email o de Internet. Así que pido desde hoy vuestra ayuda y colaboración para la fiesta de cumpleaños de este ¡Por fin es viernes! (27 de febrero). Podéis mandar vuestras ideas, videos, canciones, escritos, fotos y todo lo que esas mentes vuestras puedan dar de sí a agendasemanal@gmail.com

Y como siempre y por favor, mucho cuidado, que yo si que me molestaría en buscaros si el lunes no os encuentro ahí a todos.